sábado, 29 de noviembre de 2014

Instagram

Ojala, sueño que esta letra se cumpla, en estas llegamos al hotel, Burguitos está súper-tensa, al bajar, con el helor, se le pasa, se nos pasa, saludamos a todos, llegamos súper-apunto, para el pica-pica que es lo que mola, je! me emborracho, bastante, y empiezo a pasármelo bien me río muchísimo con todos, y todos conmigo, pq no es por creerme simpática, pero soy bastante cachonda...

Dp llega mi amiga Azafata, empieza la diversión, hablamos, bailamos, el Tete está encantado con ella ("esta chica no puede venirse con nosotros a currar???" ja! ojala!), no me extraña, es genial.

Rajuela y Burguitos en mitad de la noche deciden que tienen que hablar, sin q yo esté delante, se marchan, a mi eso no me gusta, me quedo con Descargar Instagram gratis demás, y tengo q aguantar el rapapolvo de Isabel, me dice:
"Uno a veces cuando lleva muchos años con su pareja se aburre, pero si te aburres déjalo todo ya, pero deja de estar así, ya vale, no tía?? no vas a decir nada??"
"No Isabel, tu te lo dices todo, yo no tengo Descargar Instagram gratis que decirte" y con esas cojo a Azafata y nos vamos al hotel, subimos a su habitación y llorando le cuento TODA la historia Burguitos-Rajuela-LaPunyalitos, no flipa, ni me juzga, ni me dice nada, que me entiende, perfectamente, que a ella le pasó, pero q lo suyo aún es más fuerte, no sé, depende quien lo diga...

Vuelven Rajuela y Burguitos nos vamos a nuestra habitación las 3, hablamos mil hasta las 4 de la mañana, lloro mucho, no puedo mirar a los ojos a ninguna de las dos, con una se me parte el alma, y con la otra tb, duele, duele mucho Click aquí.

No lo solucionamos, se siguen odiando y yo sigo amando, el Tete en la habitación de al lado por lo visto lo oye todo, a la mañana siguiente con los ojos como un besugo las dos bajamos para irnos a la reunión, el Tete tb tiene una cara fatal, nos cuenta que no ha dormido nada, q solo penaba en el daño q nos estábamos haciendo, yo no puedo parar de llorar, y él tiene los ojos bañados en lágrimas, cuesta creer, pero sí.

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